Caracterización de los materiales del sistema solar: meteoritos y muestras de cometas y asteroides retornados

La caracterización mineralógica y compositiva de meteoritos y otros materiales del sistema solar traídos a la Tierra por misiones de retorno de muestras es un área de creciente interés científico, particularmente para desarrollar técnicas de utilización de recursos in situ (ISRU).

Investigadores del IEEC utilizan diferentes técnicas instrumentales para estudiar dichos materiales. En primer lugar, se aplica microscopía petrográfica (en luz transmitida y reflejada) para estudiar secciones delgadas de los materiales. Esta técnica permite construir mosaicos y respaldar la identificación de Regiones de Interés (ROI, por sus siglás en inglés) para ser caracterizadas mediante un amplio espectro de tecnologías en colaboración con entidades públicas y privadas externas: microscopía electrónica de escaneo (SEM, por sus siglás en inglés), microscopía electrónica de transmisión (TEM), y espectroscopia de rayos X con dispersión de energía (EDX, por sus siglás en inglés) para identificar minerales mediante rayos X. Se utiliza una microsonda electrónica para determinar con precisión la química elemental en las regiones de interés en meteoritos del tamaño de una micra.

Además, también se utilizan: microscopía electrónica de transmisión de alta resolución (HRTEM), difracción de rayos X (DRX) y espectroscopia Raman para identificar minerales y transformación de choque en muestras extraterrestres. La nanoindentación de estos materiales también permite a los investigadores establecer las propiedades mecánicas de los meteoritos y sus cuerpos progenitores. La espectrometría de masas de plasma acoplado inductivamente (ICP-MS e ICP-AES) está hecha de trozos de meteoritos para obtener la abundancia elemental a granel precisa en muestras extraterrestres.

Finalmente, para comparar muestras de meteoritos con sus asteroides y cometas originales, se realiza espectroscopía de reflectancia (desde luz ultrtavioleta hasta infrarroja). Esta técnica permite obtener espectros de reflectancia que brindan una comparación directa con cuerpos del sistema solar caracterizados de forma remota.

Las aplicaciones potenciales de estas tecnologías son los procesos físicos o químicos en la exploración espacial, la búsqueda de biomarcadores y la minería de la Luna y los asteroides, así como la fabricación de materiales avanzados.